Casi la mitad de las universidades públicas de la Nación Argentina fueron creadas entre 1990 y 2015. La expansión se intensificó en los últimos quince años, a punto tal que 19 de las 55 universidades del sistema público actual abrieron sus puertas durante lo que va del siglo 21.
Sin embargo, las universidades históricas -aquellas creadas antes de 1990, desde la Universidad Nacional de Córdoba (1613) hasta la Universidad Nacional de Quilmes (1989)-, captaron el 89,1% de los alumnos de grado del país en 2015.
Las universidades públicas nacionales creadas entre 1990 y 2015 representan la mitad de las instituciones del sistema pero captan sólo el 10% de los alumnos de grado del país.
El Presupuesto Nacional también está fuertemente orientado a los establecimientos de mayor trayectoria; el Congreso Nacional asignó 89,7% de la partida universitaria de 2015 a las 29 instituciones históricas.
El análisis del presupuesto de las universidades de ese año revela una mayor incidencia del Poder Ejecutivo Nacional en el financiamiento de las universidades creadas a partir de los ´90 (a través de programas y refuerzos extra presupuestarios + recursos canalizados por el ex Ministerio de Planificación).
Si bien todas las universidades recibieron del Ejecutivo recursos adicionales a los aprobados por el Congreso, para las universidades históricas estos representaron 19,7% de sus ingresos, mientras que para aquellas creadas luego de la salida de la convertibilidad la incidencia promedio fue de 35%.
De cada $10 del presupuesto nacional para universidades, casi $9 se destinan a instituciones fundadas antes de la década del ´90. Las creadas posteriormente dependen de refuerzos extra del Poder Ejecutivo para funcionar.
De hecho, entre las instituciones creadas luego del 2002 hay varias que superan ese promedio, como las universidades Tres de Febrero (55%) y General San Martín (43,9%). El extremo es el de las universidades de Alto Uruguay, Comechingones, Defensa Nacional, Hurlingham y Rafaela que en 2015 dependieron 100% de programas y refuerzos del Poder Ejecutivo en función de su reciente creación.
Independientemente de la fuente de financiamiento, las universidades creadas en los últimos 25 años son las más caras para el sistema. Así, las instituciones de los ´90 tienen un costo por alumno de grado que se sitúa 22,1% por arriba del promedio general, mientras que las creadas entre el 2000 y el 2015 lo superan en 26,8%.
Las universidades creadas entre el 2000 y el 2015 tuvieron un costo por alumno 26,8% superior al promedio del sistema.
Por otra parte, cuanto más nuevas las universidades, menor la incidencia de la partida salarial. Así, mientras que las universidades históricas destinaron el 88,2% de su presupuesto a pagar salarios, el pago a docentes y otro personal insumió sólo 56,8% del presupuesto total de las universidades creadas en el siglo 21.
El informe completo sobre el gasto en universidades públicas nacionales en la Argentina (2015) fue realizado por Oscar Cetrángolo y Javier Curcio y puede ser consultado aquí.
Ricardo Braginski publicó hoy un análisis periodístico sobre la base de este informe en el diario Clarín.
Una respuesta a «Universidades: datos a tener en cuenta»
Inicio de una muy interesante investigación sobre las universidades que deberá continuarse con el seguimiento de estudiantes ingresados y egresados, carreras elegidas, rendimiento académico, evaluación de los niveles del profesorado.
En principio y desde el punto de vista financiero, sobran universidades.