Comparto aquí la entrevista que me hizo Guido Carelli Lynch en el cierre del 2018.
Cara a cara
“Macri no resolvió los problemas económicos, pero tampoco los creó”
-Ya lleva 45 años de militancia. ¿Cuál fue el mejor momento para ser radical?
-No es una manera muy buena de decirlo, porque un radical de ley no disfruta el poder. Un radical de ley sufre el poder. Hay otros actores políticos que lo disfrutan, festejan y frivolizan. A un radical de ley no le pasa eso. ¿Cuál es el mejor momento para sentirse radical? Cuando uno sintoniza con la demanda social y forma parte de las mayorías. La adversidad siempre es fea.
-Pensé en el regreso de la democracia.
La inauguración democrática es una la s cosas mas emocionantes que uno pudo vivir.
-¿Y ahora? ¿En Cambiemos sufren el poder o lo ejercen?
-El radicalismo forma parte de una coalición. Somos fundadores de esa coalición. Lo hicimos sabiendo que éste es un tiempo de coaliciones. El último presidente que fue presidente de un solo partido fue Alfonsín en el 1983. Formamos parte de esta coalición, que no tiene el funcionamiento que nos gustaría que tuviera, pero nos sentimos orgullos de que los presidentes de los interbloques, Mario Negri y Luis Naidenoff sean radicales. Estamos orgullosos de que dos de los episodios de este año decisivo que se va fueron titularizados por radicales. El (ex) ministro (de Salud Adolfo) Rubinstein y la discusión de la Interrupción Voluntaria del Embarazo y el embajador Pedro Villagra, sherpa en el G20. Para mejorar y dar un salto de calidad en la coalición debemos seguir siendo parte de la misma.